Dossier de Prensa
Tiempos para el Liderazgo
— Juan José López Delgado, © Diario Sur (13/10/2011)
Iré al grano. No tengo demasiado espacio. No quiero hablar de crisis sino de oportunidades. Vivimos en la actualidad un momento histórico. Si analizamos la historia de la humanidad, ésta se caracteriza por la existencia de momentos álgidos y momentos críticos, pero lo interesante es observar como, precisamente en los momentos críticos, se va gestando el caldo de cultivo necesario para la emergencia de la figura de un líder con todos sus atributos, capaz de representar y encarnizar unos valores de un nuevo ordenamiento de la realidad que ponga rumbo hacia la esperanza.
Llevamos varios años de crisis y probablemente estemos así un tiempo más. Porque aquello que comenzó siendo una crisis financiera se ha convertido en una crisis sistémica. No sólo por los efectos de lo financiero en otras áreas de la sociedad, sino porque a partir de los efectos de la primera se nos está obligando a ejercitar la reflexión, y a darnos cuenta de que no sólo lo financiero está en crisis. También lo social, lo familiar, lo educativo, lo político, y tantas cosas más.
El momento actual es interesante, crucial y determinante en el devenir de nuestra historia, porque es tiempo para el liderazgo. Para que éste tome la palabra, la reivindique como propia para su objetivo, y pueda cobrar así un nuevo sentido determinados significantes bastantes cronificados en todos los discursos.
Creo que lo más importante en esta vida no es lo que nos sucede sino la forma de afrontar lo que nos sucede. Por tanto, estamos ante una etapa de oportunidades para poder demostrar la maravillosa capacidad de superación del ser humano. Oportunidad para los empresarios, para los directivos, para los candidatos a un empleo, para las familias sin subsidio, para los gobernantes y para los líderes.
La sociedad necesita, y al mismo tiempo demanda a través de los síntomas de crisis, nuevos discursos en todas las áreas de la sociedad para que estos puedan reordenarse.
El líder es alguien que, a diferencia del resto de las personas, es capaz de tomar la iniciativa en un momento determinado. Es alguien que tiene la capacidad para influir en los demás y generar en ellos la convicción de que el camino a transitar es el acertado. Alguien que posee la virtud de motivar y alentar a que no desfallezcamos todos en el intento de conseguir nuestros objetivos. Una persona que tiene la competencia necesaria para establecer la dirección adecuada.
Es tiempo para que todos intentemos ser un poco más líderes de nuestras vidas, de nuestros trabajos, de nuestras empresas, de nuestras familias y descubramos o desarrollemos al líder que llevamos dentro.